Para muchas personas, la fantasía sexual va de la mano con el sexo. La fantasía funciona como combustible para el sexo. Te enciende, te prende fuego y te mantiene en llamas, especialmente cuando la realidad real no lo hace. Está considerado totalmente aceptable utilizar la fantasía sexual como estimulante, e incluso alentado como una forma para encontrar satisfacción sexual. La fantasía se ha convertido en el detonante de las respuestas físicas del cuerpo, pero las fantasías son un mundo proyectado y no suceden de verdad, por lo tanto, no tienen absolutamente nada que ver con la realidad interna del cuerpo humano. De hecho, la fantasía nos hace ausentes en el presente. La función de la pornografía, que es un tipo de fantasía, es estimular la imaginación y encender el cuerpo. Su uso regular puede provocar dependencia para la estimulación sexual y la excitación, y lentamente la verdadera sensibilidad del cuerpo se perderá y dejará de responder, como entumecido un por el uso excesivo e inapropiado. La impotencia es un signo de que el cuerpo pierde su sensibilidad innata a la presión y tensión del sexo estimulante. Los ojos abiertos o mantener un contacto visual receptivo es la mejor manera de reducir la fantasía sexual. Tener los ojos abiertos te ancla en el presente, en tu situación inmediata, y te ayuda a evitar la deriva en un mundo de fantasía.
EL PENSAMIENTO POSITIVO COMO VISUALIZACIÓN O IMAGINACIÓN
Los pensamientos dirigidos de manera positiva pueden anclar la mente en la realidad corporal real y contrarrestar la «ausencia» de fantasía o pensamientos distractores. Nuestras mentes tienen una tremenda influencia sobre el cuerpo y sus respuestas, a menudo en detrimento nuestro, pero afortunadamente también en gran medida para nuestro beneficio. Cuando hay un cambio en la mente en relación al sexo, seguido de un nuevo tipo de experiencia, habrá un cambio correspondiente en la naturaleza y el contenido de los pensamientos que uno tiene en relación con el sexo.
El poder del pensamiento en forma de visualización o imaginación (en oposición a la fantasía) puede ser utilizado con la intención de conectar con los reinos internos del cuerpo. Este es un mundo aparte de la fantasía y estimulación sexual. La visualización o la imaginación pueden ayudar a cultivar «los pensamientos correctos” en relación con el cuerpo, para que su sabiduría interior pueda despertarse y expresarse. Tu imaginas y sustentas lo que es, algo que existe, y no algo que no existe, como es típico de la fantasía. La imaginación despierta la energía o la energía sigue a la imaginación, y pronto estas sensaciones internas sutiles, extraordinariamente deliciosas, realmente comenzarán a sentirse. Algunos ejemplos de cómo se puede utilizar la visualización: Visualiza la luz vibrando en tus células, el color dorado fluyendo y fluyendo a través de tu cuerpo, o conectando vuestros propios polos positivo y receptivo. O el hombre puede visualizar la energía, el amor, la luz o el resplandor dorado fluyendo desde su pene como un polo positivo. Y la mujer puede imaginarse recibiendo estas emanaciones de luz dorada en su vagina. La mujer puede usar su imaginación de la misma manera y visualizar la energía del amor que irradia de los senos y pezones, donde se encuentran sus polos positivos. El hombre puede imaginarse recibiendo el amor y la luz en su corazón y pecho.»
— Fragmento del libro de Diana Richardson «Slow Sex The Path to Fulfilling and Sustainable Sexuality» Twitter
Reúne los siete pergaminos con las siete pistas para encontrar el tesoro oculto en tu energía sexual.
— Wen-Tzu (Enseñanzas de Lao Tse) Twitter