«Las caricias, tanto masculinas como femeninas, constituyen un factor de suma importancia en el desarrollo del deseo y de las sensaciones eróticas. Las caricias orientales se basan en la combinación de dos maniobras distintas: presiones estáticas y presiones dinámicas.Las presiones estáticas consisten en hacer presión sobre una determinada zona del cuerpo del amante, sin realizar movimientos de ningún tipo. Aunque tal vez para la mentalidad del individuo occidental resulten un tanto extrañas, lo cierto es que tienen un alto potencial erógeno. En la mujer, estas presiones deben efectuarse, en un primer momento, sobre las manos, las orejas, la nuca, el abdomen, la cintura y la cara interna de los muslos. Las presiones sobre los senos y la zona genital se realizarán en fases más avanzadas. En el hombre, al igual que en la mujer, la presión sobre la zona genital deberá dejarse para último término y, una vez allí, se ejercerá primero sobre los testículos y después sobre el lingam, ascendiendo desde la base hacia el glande.Las presiones dinámicas se aplican en las mismas zonas y en el mismo orden, pero en esta modalidad ni dedos ni manos dejarán de moverse recorriendo el cuerpo del amante.Los sutiles contactos de las palmas de las manos. Resulta muy conveniente que durante los primeros momentos del maithuna los dos amantes contacten las palmas de sus manos después de haberlas friccionado cuidadosa y enérgicamente por, aproximadamente, un minuto. Al colocar sobre el cuerpo de la pareja estos dos polos energizados por la fricción, se produce un poderoso intercambio de bioenergía. Lo mismo sucede si se entrelazan las manos de ambos amantes. Este trueque de flujos energéticos no sólo se corresponde con un aumento de vigor general que favorece la actividad sexual, sino también con un intercambio de sensibilidades. Asimismo, facilita la eliminación de pensamientos negativos y bloqueos.Más allá del momento inicial de la ceremonia del maithuna, los contactos con las palmas de las manos se pueden renovar en cualquier momento y son muy útiles durante la penetración, cualquiera sea la posición adoptada.»— Fragmento del libro «Cómo practicar sexo tántrico» de Abraham Vatek Twitter
Reúne los siete pergaminos con las siete pistas para encontrar el tesoro oculto en tu energía sexual.
«Para que algo sea contraído, antes debe ser expandido. Para que algo sea debilitado antes debe ser fortalecido. Para que algo sea destruido, antes debe ser levantado. Para que alguien obtenga algo, antes alguien debe haberlo dado. Este es el Misterio Oculto. Lo tierno y lo débil vencen lo duro y lo fuerte. Los peces no deben salir de las profundidades de las aguas, al igual que el reino no debe exhibir sus armas.»
— Tao Te Ching (Lao Tse) Twitter