PISTA V

EL PLACER SIN AMOR ES UN ESPEJISMO

Manzana roja y amarilla. Cada una tiene una parte de sí misma con forma de corazón del color de la otra. Representa el amor como reconocimiento de uno mismo en el otro.

Cuando hablábamos del tercer pergamino, mencioné que adentrándonos en «el otro camino» existen otras cumbres alternativas a la descarga orgásmica genital. Describí la manera en que el tiempo puede llegar a pararse y hacerte desaparecer. Descubrirás que esa experiencia no es otra que la culminación del amor. En cualquier caso siempre es el amor lo que te habrá llevado hasta ahí, aunque no lo sepas. Quizá pienses que es el deseo, pero todo deseo solo es una forma que toma Amor. La única fuerza detrás de toda acción y todo anhelo es el reencuentro con nuestra esencia de plenitud olvidada, en la que nada queda fuera y no hay separación entre el yo y el otro. Todo objeto de deseo lo es porque identificamos en él esa esencia olvidada. Nos identificamos a nosotros mismos en él y eso nos provoca un sentimiento de afinidad muy intenso. Ese sentimiento es el Amor. De ahí surge el anhelo de volver a hacernos uno con ese objeto de deseo, y a través de esa unión, hacernos uno con nuestra esencia de plenitud olvidada.

Cuando hablábamos del tercer pergamino, mencioné que adentrándonos en «el otro camino» existen otras cumbres alternativas a la descarga orgásmica genital. Describí la manera en que el tiempo puede llegar a pararse y hacerte desaparecer. Descubrirás que esa experiencia no es otra que la culminación del amor. En cualquier caso siempre es el amor lo que te habrá llevado hasta ahí, aunque no lo sepas. Quizá pienses que es el deseo, pero todo deseo solo es una forma que toma Amor. La única fuerza detrás de toda acción y todo anhelo es el reencuentro con nuestra esencia de plenitud olvidada, en la que nada queda fuera y no hay separación entre el yo y el otro. Todo objeto de deseo lo es porque identificamos en él esa esencia olvidada. Nos identificamos a nosotros mismos en él y eso nos provoca un sentimiento de afinidad muy intenso. Ese sentimiento es el Amor. De ahí surge el anhelo de volver a hacernos uno con ese objeto de deseo, y a través de esa unión, hacernos uno con nuestra esencia de plenitud olvidada.

Manzana roja y amarilla. Cada una tiene una parte de sí misma con forma de corazón del color de la otra. Representa el amor como reconocimiento de uno mismo en el otro.

Tanto si piensas que el deseo que sentías por tu pareja era exclusivamente sexual, como si piensas que era basado en el amor, igualmente, tu viaje por «el otro camino» te habrá llevado a adentrarte cada vez más en la satisfacción de ese deseo. Cuando deseamos cualquier cosa, lo que buscamos es experimentarla completamente. Si has conseguido realmente hacer de tu relación sexual un estado meditativo, permaneciendo en el momento presente, disolviendo cualquier resistencia a lo que existe en él, olvidando el pasado y el futuro, habrás podido llegar a experimentar a tu pareja de una manera mucho más intensa de lo que creías que era posible. Esa satisfacción habrá multiplicado por mil ese sentimiento de identificación y afinidad. A medida que aumenta ese sentimiento de afinidad y la emoción estremecedora que nos produce, se van cayendo todas las defensas de nuestra mente que nos mantienen alerta como un medio de protección frente a otro. Se caen porque al percibirlo cada vez más como indistinguible de uno mismo, toda defensa deja de tener significado. Deja de tener sentido mantener una imagen frente a él, que se aproveche de nosotros, que nos engañe o cualquiera de esas cosas que nuestra mente teme. Todo lo que sentimos es un profundo y rotundo «SÍ», sin argumentos, sin causa ni justificación. Todo nuestro ser está alineado con la persona que despertó nuestro deseo, como dos notas musicales que vibran en la frecuencia exacta haciéndose una sola. Desde ese estado de percepción las diferencias entre conceptos como el placer, el deseo o el amor dejan de tener sentido. Ya no hay otra cosa que amor, y sabemos que así fue desde el principio, independientemente de las palabras que escojamos, o de si esa certeza es siquiera traducida a conceptos o no.

Es esa caída de nuestras defensas que disuelve todas las fronteras de nuestra identidad, incluyendo a la persona amada, la que provoca esa culminación del éxtasis en la que nosotros desaparecemos. El quinto pergamino nos dice:

"Para nosotros solo existe la persona amada, pero al desvanecerse totalmente el perímetro que nos definía, no solo ella entró en nosotros, sino todo el universo."

Esfera que contiene planetas y estrellas dentro de sí misma

"Para nosotros solo existe la persona amada, pero al desvanecerse totalmente el perímetro que nos definía, no solo ella entró en nosotros, sino todo el universo."

Esfera que contiene planetas y estrellas dentro de sí misma

Entonces descubrimos que esa expansión es nuestro estado original y natural. Descubrimos que tanto nosotros como la persona amada siempre fuimos todo el universo. Ambos desaparecemos y solo queda ese estado de plenitud sin pasado, ni futuro, ni propósito, donde ninguna carencia es posible.

"Cuando estás enamorado, el cuerpo de la persona que amas se desvanece, desaparece. La forma ya no está, y se revela lo sin forma. Estás ante un abismo. Es por eso por lo que tenemos tanto miedo al amor."

"¿Por qué sucede esto? Esto sucede porque, en realidad, toda persona es sin forma. No eres un cuerpo. Te mueves como un cuerpo, vives como un cuerpo, pero no eres un cuerpo. Cuando vemos a alguien desde el exterior, es un cuerpo. El amor penetra en el interior, y entonces ya no vemos a la persona desde el exterior. El amor puede ver a una persona tal como la persona se ve a sí misma desde el interior. Entonces la forma desaparece."

"Cuando la forma desaparece, la persona que amas se vuelve el universo, lo sin forma, el infinito. De pronto, Devi se da cuenta de que no está haciendo una pregunta sobre Shiva; está haciendo una pregunta sobre el universo entero. Ahora todas las estrellas se mueven en él, y todo el firmamento y todo el espacio está rodeado por él."

"La persona amada se vuelve simplemente una puerta al universo."

"Cuando eres un ego, eres como una cima." ... "nada puede entrar en ti. Cuando uno se entrega, uno se vuelve como un valle. Uno se vuelve profundidad, no altura. Entonces toda la existencia comienza a entrar a raudales en él por todas partes. Él es simplemente un espacio vacío, una profundidad, un abismo, sin fondo. La existencia entera empieza a entrar por todas partes. Se puede decir que Dios corre a él desde todas las partes, entra en él por todos los poros, lo llena totalmente."

Fragmentos de "El Libro De Los Secretos" de Osho. Vigyan Bhairav Tantra. Tweet

Esa es una gran diferencia entre el sexo profundo y una relación sexual rápida y superficial. Por esa razón el sexo superficial puede ser tan adictivo y el sexo profundo nos libera. Nos quedamos enganchados a la persona que nos ha dado ese momento de placer físico, que en realidad solo nos resultó satisfactorio en la medida en que tenuemente reflejaba la satisfacción más profunda anhelada, que no conocíamos, y por lo tanto no sabíamos como obtener. Pensamos que para volver a obtener esa satisfacción necesitamos a esa persona. Sin embargo, cuando llegamos a fundirnos completamente con alguien hasta disolver nuestra identidad, conocemos nuestra esencia de infinitud, y sabemos que todo lo que podemos llegar a desear está siempre presente en nosotros.

Si realmente te adentras en «el otro camino», acabarás encontrando el amor y sabrás que fundirte completamente con la otra persona era lo que siempre anhelaste. Así que a partir de entonces, no vivirás ninguna relación sexual como un placer exclusivamente físico. Pero esta dimensión mágica de la sexualidad no solo implica a tu corazón y a tu espíritu, incluye a tu cuerpo porque es uno con ellos. Aunque parezca inexplicable para la razón, a medida que vayas profundizando en esa emoción de amor y disolviendo los límites de tu identidad, descubrirás que las respuestas de tu cuerpo y la manera en que sientes tu energía sexual se transforman drásticamente. De todas las pistas que te puedo entregar, el amor es sin duda la más poderosa. Así que ahora que conoces este secreto, puedes comenzar a aplicarlo desde el principio.

Ondas sobre el agua que se funden la una en la otra

El quinto pergamino te sugiere que para encontrar la magia en tu sexualidad, desde que comiences a sentir excitación te centres en el amor que sientes por tu pareja. Sea cual sea la magnitud de ese amor, tu capacidad de amar crecerá. Te sugiere que te concentres de tal manera que la excitación sexual que vas acumulando provenga exclusivamente del amor, y no de la apariencia o de las formas físicas de su cuerpo, ni de realizar determinadas acciones que te resultan excitantes. El quinto pergamino dice: «Mira a tu pareja a los ojos. Percibe su ser completo.»

En el momento de la relación sexual, no es infrecuente alimentar la excitación con fantasías sexuales que trasladan nuestra imaginación hacia otras situaciones, o incluso hacia otras personas. Aun cuando no es el caso, es muy común revestir a la pareja con la máscara de ciertos «personajes», roles, imágenes predefinidas socialmente, y patrones inconscientes que sirven de vía para satisfacer deseos reprimidos, fruto de nuestros propios conflictos internos. No estamos teniendo sexo con nuestra pareja realmente. Los dos casos no son muy diferentes a una masturbación compartida. Sin embargo lo hacemos porque funciona. Nos excita rápidamente y nos produce placer, o al menos comparado con lo que conocemos. El quinto pergamino nos dice que olvidemos todo eso, que recuperemos nuestra mirada inocente, capaz de atravesar todo lo que es nuestro y percibir plenamente lo que la otra persona es. Nos dice que así lo que realmente hacemos es atravesar todo lo que no era nuestro hasta alcanzar nuestra esencia genuina que reside dentro de la otra persona. Nos dice:

Mirada con resplandor en el tercer ojo

"El amor es la única vía directa para penetrar el velo de la ignorancia, porque el deseo de experimentar al ser amado absolutamente y en su completa realidad es la única fuerza tan poderosa como para disolver todas las distorsiones en nuestra percepción."

"El amor es la única vía directa para penetrar el velo de la ignorancia, porque el deseo de experimentar al ser amado absolutamente y en su completa realidad es la única fuerza tan poderosa como para disolver todas las distorsiones en nuestra percepción."

Mirada con resplandor en el tercer ojo

"En el camino de la voluntad hay métodos."

"Todos los métodos son no-entrega."

"La entrega sucede cuando no eres, de modo que tú no te puedes entregar. Por eso es que la entrega no puede ser una técnica. Tú no te puedes entregar: tú eres el obstáculo."

"Devi, no ha llegado a Shiva por medio de ningún método. Simplemente se ha entregado."

"Ella misma ha llegado mediante el amor; el amor es suficiente en sí mismo, el amor no necesita nada más. Ella ha llegado mediante el amor, de modo que no sabe nada sobre métodos, técnicas."

"No podemos preguntar cómo amar, no podemos preguntar cómo entregarnos. ¡Sucede! El amor sucede, la entrega sucede. El amor y la entrega son profundamente una sola cosa."

Fragmentos de "El Libro De Los Secretos" de Osho. Vigyan Bhairav Tantra. Tweet

El quinto pergamino también nos dice: «Para poder acceder a esa fuerza y liberar la magia latente en tu energía sexual, mantén el contacto visual con los ojos de tu pareja todo el tiempo posible. Siéntela todo lo intensamente que puedas, y siente cómo tu mirada es tu búsqueda de experimentar la realidad de su ser completo. Siente cómo la emoción de amor prende todas las células de tu cuerpo y lo toma. Sé el amor. Descubre que es lo único que siempre has sido. Deja que todo lo demás desaparezca y siente cómo tu corazón se expande en todas direcciones, mucho más allá de los límites de tu cuerpo. Siente cómo para el amor no existe ningún tipo de límite y no hay diferencia entre esa energía, y la que creías que era sexual y solo residía en tus genitales.»

Si sientes impulsos de volver a esos estímulos a los que estás acostumbrado, y que son efectivos para producirte rápida excitación sexual, respira, relájate, y déjalos pasar exactamente igual que en una meditación. En el quinto pergamino dice: «Haz del sexo una meditación y del amor tu objeto de concentración». Al principio, es muy posible que te excites lentamente. Esto es porque tu mente y tu organismo conservan una inercia, acostumbrados a sus antiguos patrones de funcionamiento. Pronto descubrirás que el placer y la satisfacción que obtienes así, es tan incomparablemente superior, que los estímulos que antes te resultaban atractivos y excitantes rápidamente perderán interés para ti. Llegará un momento en que evocarás con facilidad el éxtasis que has conocido a través del amor. Entonces una sola mirada, un beso, o simplemente el recuerdo de la sonrisa de la persona amada, movilizarán poderosamente tu energía sexual, especialmente si la has cultivado por algún tiempo sin descargarla. Cuando hablando del segundo pergamino, decíamos que era necesario prolongar la excitación en el tiempo bastante más de lo que estamos acostumbrados para liberar toda la magia de la energía sexual, dijimos también que omitir la descarga genital hacía que la energía estuviera disponible para activarse más rápidamente. Cuando la energía es conservada en tu cuerpo y cultivada a través del amor, tal y como el quinto pergamino nos sugiere, puede expresar su magia en formas tan repentinas y espectaculares como la que acabo de describir, porque el amor es la fuerza que más poderosamente activa la energía sexual. Por otro lado, también dijimos en el segundo pergamino que la cantidad de energía activada no era el único factor a la hora de desplegar esa magia. El amor no solo activa la energía sexual, sino que transforma completamente la manera en que se experimenta. Sería correcto decir que es la principal fuente de su magia y el principal factor de todos los que se mencionan en los pergaminos, si no fuera porque en realidad todos culminan en él. El sexto pergamino profundizará más en esas expresiones de la magia de la energía sexual que desata el amor, en su efecto en nuestro cuerpo y su dimensión energética.

Si al principio te cuesta concentrarte para enfocarte en el amor, considera olvidarte por completo de tus genitales. Disfruta de las caricias, los besos y los abrazos. No pienses en tu excitación, ni en cuánto ha avanzado o a dónde se dirige. Deja que tu pareja absorba toda tu atención y tus emociones. Una imagen icónica del tantra es ver a los dos miembros de la pareja sentados el uno frente al otro mirándose a los ojos hasta llegar al orasmo. Recuerda que el tiempo no es precisamente una limitación. Alargar la relación sexual no es un problema. ¡Todo lo contrario!»

Volviendo al segundo pergamino, ¿recuerdas que también decía que no bastaba con esa prolongación de la excitación? ¿Recuerdas que decía que el tesoro está fuera del tiempo? También decía que con los siguientes pergaminos entenderías cómo salir de él. El tercer pergamino nos adelantaba algunos detalles sobre esos momentos cumbres en los que por unos instantes lo hacemos. Si has experimentado con esas primeras pistas, estarás preparado para comprender mejor el mensaje del quinto y el sexto que profundizan más en esa disolución de la ilusión del tiempo. El quinto nos dice que: «Nuestra mente saltarina hilvana su versión comprimida de la realidad a largas puntadas, uniendo puntos inconexos en el tejido continuo del infinito. Reduce su percepción a ellos y los coloca uno tras otro, tejiendo así su ilusión de transcurso lineal temporal.» Nos dice que salir del tiempo solo es posible a través de la única puerta que existe para ello, una puerta siempre accesible: el momento presente. Aunque no está realmente en ningún sitio (ya que se abre al infinito y en el infinito no hay referencia de espacio ni tiempo), desde nuestro marco temporal se percibe como si se hallara en el espacio contenido entre una y otra puntada, o como nosotros las llamamos: «instantes». Es una puerta inmensa, tanto como el propio infinito al que se abre, pero para nuestra mente saltarina y ofuscada, completamente ciega a todo lo que deja entre sus saltos, resulta tan escurridiza como el ojo de una aguja.

Agujero negro dentro del ojo de una aguja

Volviendo al segundo pergamino, ¿recuerdas que también decía que no bastaba con esa prolongación de la excitación? ¿Recuerdas que decía que el tesoro está fuera del tiempo? También decía que con los siguientes pergaminos entenderías cómo salir de él. El tercer pergamino nos adelantaba algunos detalles sobre esos momentos cumbres en los que por unos instantes lo hacemos. Si has experimentado con esas primeras pistas, estarás preparado para comprender mejor el mensaje del quinto y el sexto que profundizan más en esa disolución de la ilusión del tiempo. El quinto nos dice que: «Nuestra mente saltarina hilvana su versión comprimida de la realidad a largas puntadas, uniendo puntos inconexos en el tejido continuo del infinito. Reduce su percepción a ellos y los coloca uno tras otro, tejiendo así su ilusión de transcurso lineal temporal.» Nos dice que salir del tiempo solo es posible a través de la única puerta que existe para ello, una puerta siempre accesible: el momento presente. Aunque no está realmente en ningún sitio (ya que se abre al infinito y en el infinito no hay referencia de espacio ni tiempo), desde nuestro marco temporal se percibe como si se hallara en el espacio contenido entre una y otra puntada, o como nosotros las llamamos: «instantes». Es una puerta inmensa, tanto como el propio infinito al que se abre, pero para nuestra mente saltarina y ofuscada, completamente ciega a todo lo que deja entre sus saltos, resulta tan escurridiza como el ojo de una aguja.

Agujero negro dentro del ojo de una aguja

Sin embargo, tal y como nos dice el quinto pergamino, en el momento en el que la visión lúcida del amor se alinea con el ojo de esa aguja, ésta también puede atravesarlo, al igual que atraviesa a las otras distorsiones de la mente, trascendiendo así el flujo lineal del tiempo. Desde nuestro marco temporal podríamos decir que hemos alcanzado la quietud absoluta, quedando suspendidos entre dos instantes, sin alcanzar nunca el siguiente. Aunque también podríamos decir que hemos alcanzado una velocidad infinita, ya que el espacio entre esos dos instantes (o lo que es lo mismo, el momento presente), es el mismo espacio que está contenido entre todos los pares de instantes que existen, solo que observado desde diferentes puntos de vista. Por lo tanto, habitando ese espacio, lo abarcamos todo simultáneamente, y cuando lo hacemos, hemos recorrido todo el tiempo existente en el universo en un período de tiempo infinitamente pequeño, el comprendido entre dos instantes. También por esa razón, el tercer pergamino nos dice que «cuanto más lento camines más rápido avanzarás». Todos los pares de opuestos siempre son dos diferentes facetas del infinito. No son otra cosa que eso. No pueden serlo ya que el infinito, al serlo todo, es lo único que existe.

Comprender la naturaleza del tiempo nos ayuda a comprender que, cuando se trasciende su flujo lineal, esa celebración extática del amor que es la unión sexual se desenvuelve fuera de él libre de toda limitación. En primera persona, esa unión simplemente no tiene principio ni fin. A través de los ojos de las personas que observan desde un marco temporal, a menudo se prolonga y prolonga más de lo que pueden comprender.

El sexto pergamino nos describe mejor la manera en que la visión del amor trasciende la ilusión del tiempo llevándonos a la experiencia de la eternidad. Este quinto se centra en transmitirnos que solo el amor puede atravesar esa puerta. Cuando comiences a asociar las sensaciones de tu energía sexual con el amor en vez de con los patrones instintivos y las formas del cuerpo, sentirás que tu energía sexual es una fuerza muchísimo más poderosa y amplia que tu genitalidad, y que está siempre contigo. Sentirás que participa cada vez que sientes amor en cualquiera de sus formas y en cada acto creativo que entregas al universo, ya que cualquier cosa que haces no es otra cosa que una expresión de tu amor.

Chakra corazón iluminado de color verde

"¿Qué diferencia hay entre el placer físico sexual y el placer de sentir amor? Mantak Chia: Tu placer sólo está limitado por tu nivel de consciencia: La diferencia entre el orgasmo de todo el cuerpo y el orgasmo de eyaculación es la diferencia entre el amor humano y el amor animal. El animal expulsa frenéticamente sus energías. El hombre elevado conserva de manera responsable la energía vital y la transforma en amor. El hombre verdaderamente libre y sabio siempre se restaura a sí mismo y a su pareja. Este arte supremo es su deber, privilegio y alegría. El placer más puro va mucho más allá de cualquier sensación sensorial percibida a través de nuestras emociones o nuestro intelecto. Cuando cultivas tu espíritu original, tanto tu delicado sentido de los flujos energéticos sutiles como tus sensaciones físicas sobrepasan con mucho lo que la mayoría de la gente acepta como placer. La calidad de tu sensación determina la calidad de energía que tu generas y absorbes."
"Cuando elevas tu esencia sexual a un alto nivel de intuición espiritual, se convierte en esencia luminosa o semilla luminosa que ilumina tu camino por la vida y más allá. Ésta es la enseñanza de iluminación taoísta en los niveles superiores de meditación."

Mantak Chia en su libro "Cultivando la energía sexual masculina" Tweet

¡Si quieres descubrir la sexta pista abre el pergamino!

Share on telegram
Share on facebook
Share on twitter
Share on pinterest
Share on whatsapp